PostHeaderIcon Por dónde empezar

El primer paso es buscar la causa que nos ha llevado a renunciar a tener relaciones sexuales, y una vez detectada, recuperar la autoestima y mejorar el estado de ánimo.

Nunca se deben forzar las relaciones sexuales, tienes que ir enfrentándote a tus miedos de una forma progresiva.

También es importante la confianza, es decir, conocer a quien tenemos delante, para poder iniciar y finalizar sin ningún de presión. Cada persona, se enfrenta a su miedo de manera distinta, aunque en la mayoría de los casos estos miedos están relacionados, con no estar a la altura, no dar la talla y que pensaran de mí. El consejo general seria no hacer nada que uno no quiera hacer y antes de llevar a cabo una relación sexual  sentirse cómodo con la idea, dejar a un lado los miedos y prejuicios y sentimientos de culpa y acercarse a la relación sin más objetivo que el de pasar un buen rato.

Sin embargo el enamoramiento. Es el único que puede lograr que el deseo sexual reaparezca. “cuando alguien se enamora desea a la persona amada y tiene una fuerza mayor para enfrentarse a sus miedos. Eso no significa que pueda superarlos pero al menos aparece un enorme deseo de hacerlo”.

Enamorarse para superar barreras

No existen técnicas mágicas que hagan nacer el deseo, pero sí podemos trabajar para que este crezca y se reavive. El deseo no puede crearse, y una vez muerto es prácticamente imposible que vuelva a aparecer, al menos con la misma persona. Lo que si podemos es alimentarlo y cuidarlo para que se mantenga vivo en la relación.

La experiencia nos dice que hay personas que sienten miedo que su pareja no sientan como ellos esperaban creándoles la incertidumbre o la duda de volver a empezar de nuevo desde el principio.

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